Slow life : adopta un modo de vida más relajado

En consonancia con los anhelos de gran parte de la ciudadanía, la filosofía slow life forma parte de un movimiento que constituye mucho más que una simple tendencia. Se trata más bien de un modo de vida que ha venido con la intención de quedarse indefinidamente en una sociedad que desea romper con su ritmo desenfrenado. La palabra «slow» —que significa «lento» en inglés— nos recuerda la importancia de dedicar más tiempo, no solo a uno mismo y a la propia familia y amigos, sino también al interior de nuestra vivienda. ¡Y precisamente ahí es donde Schmidt quiere echarte una mano proponiéndote algunas ideas para incorporar un poco del espíritu «slow life» a tu decoración!

La slow life o vida pausada como regreso a lo esencial

Slow food, slow business, slow cosmetic, slow city… ¡El movimiento «slow» se ha puesto en marcha y no parece dispuesto a detenerse! La tendencia slow life cuenta con múltiples adeptos y se ha extendido por todo el mundo, lo que refleja una verdadera voluntad ciudadana de reducir el ritmo impuesto por un entorno frenético que nos impide encontrar nuestro propio equilibrio. El concepto «slow» no implica detenerse, sino simplemente «tomarse su tiempo». Tomarse el tiempo de pensar en lo que queremos. Tomarse el tiempo de observar nuestro planeta y los cambios que lo amenazan. Tomarse el tiempo de averiguar qué nos hace felices. Este movimiento constituye una verdadera filosofía de vida y se sustenta en el deseo de impulsar un cambio profundo recuperando el libre albedrío y optando por modalidades de consumo más inteligentes.

El regreso a lo natural en versión reciclada.

Vuelta a la sencillez

En este intento de regresar a los orígenes, la filosofía slow life aboga por el esencialismo. Aplicado a la decoración de interior, este principio se traduce en crear ambientes sencillos y minimalistas decorados preferiblemente con objetos y accesorios de calidad fabricados de manera ecorresponsable. Las líneas deben ser simples y los espacios, poco recargados. Se trata de quedarse exclusivamente con aquello que sea útil o único. La decoración slow no apuesta por la acumulación ni la ostentación, sino más bien por el bienestar y los ambientes que invitan a estar en casa. El estilo escandinavo (lagom, hygge, etc.) se ajusta plenamente a esta tendencia combinando colores suaves, materiales naturales y una preferencia por los espacios abiertos y luminosos.

Accesorios y objetos decorativos para el cuarto de baño.

Más respeto por la naturaleza

Para los adeptos de la tendencia slow life, la naturaleza ocupa un lugar absolutamente fundamental. Olvidada y maltratada durante mucho tiempo por el ser humano, esta ha de volver a constituir necesariamente un elemento central de nuestras vidas. Ello pasa, en primer lugar, por adoptar un modelo de consumo más respetuoso y más ecológico. Desde hace muchos años, el equipo de Schmidt se dedica de lleno a la elaboración y fabricación de productos ecorresponsables priorizando el uso de materiales 100 % reciclables u optando exclusivamente por maderas procedentes de bosques gestionados de forma sostenible. Dentro de la tendencia de decoración slow, la naturaleza constituye asimismo una fuente inagotable de inspiración. Su belleza y la pureza de sus formas han contribuido considerablemente al diseño de nuestras gamas de muebles a medida, dando lugar a toda una diversidad de productos de líneas sencillas: dormitorios principales, vestidores integrados en cabecero, estanterías de almacenaje, muebles de cuarto de baño, etc.

Rincón de salón con paneles de material 100 % reciclado en Twist y Tavern.

Preferencia por la suavidad

Para sentirnos bien en nuestra propia casa, el movimiento slow life aboga por la vuelta a los colores pastel. Este tipo de tonos, considerados durante mucho tiempo anticuados, vuelven a estar sorprendentemente más de moda que nunca gracias al deseo de lograr un espacio interior lleno de confort y suavidad. Como si la vida en el mundo exterior fuera ya suficientemente agresiva y lo último que necesitáramos fuera decorar nuestra casa con colores chillones. De ahí que los colores pastel resulten perfectos para satisfacer esa necesidad de calma y serenidad. Siempre a la vanguardia de las tendencias, los expertos de Schmidt han diseñado una gama de colores pastel como «La vie en rose», un rosa empolvado sumamente elegante, o también «Clay», un beige cálido que aportará un toque de frescura a tu decoración. Por otro lado, tu decoración en tonos pastel no tiene por qué reducirse exclusivamente a la pintura de las paredes. Puedes optar asimismo por colocar uno o dos muebles que luzcan alguno de estos colores de moda realzados sutilmente con pequeños toques dorados…

Pequeño escritorio auxiliar que resulta práctico a la par que estético.

Preferencia por el uso de materiales naturales

En cuanto al diseño, el uso de materiales naturales constituye una opción ampliamente respaldada por quienes desean adoptar un modo de vida más sencillo. Nuestra gama Twist se sitúa en esta tendencia ofreciendo a nuestros clientes diversos objetos decorativos e incluso muebles auxiliares. Su textura, junto con su tono gris oscuro, aporta al instante un toque de autenticidad y naturalidad sumamente relajante. En Schmidt otorgamos gran importancia a la producción ética y nos esforzamos por ofrecer una amplia gama de productos diseñados con materiales naturales o reciclables, como madera, cristal, cerámica o incluso mármol. Además, el concepto de upcycling —«suprarreciclaje» en español— constituye otro de los fundamentos de la decoración slow. Reutilizar, renovar, dar una segunda vida a los muebles u objetos… He aquí otro de los principios esenciales de este movimiento.

¿Necesitas conjugar funcionalidad y diseño? Opta por este agradable rincón de lectura junto a la librería.

Recuperación de la cocina como espacio propio

Decidir lo que vamos a comer supone, en primer lugar, elegir y cocinar personalmente los ingredientes. Olvídate de la comida procesada que contiene aditivos y colorantes… El movimiento slow food reivindica la elaboración casera. Ojo: ello no significa, no obstante, que tengamos que convertirnos en chefs de cocina, sino más bien preparar con esmero recetas sencillas y rápidas cuya elaboración esté en consonancia con el modo de vida familiar. Para ayudarte en este paso tan importante en favor de la salud y el medio ambiente, el grupo Schmidt ha perfeccionado el diseño de sus cocinas con el fin de que resulten tan funcionales como estéticas. ¡El objetivo es ofrecerte una serie de cocinas en las que cualquier inspiración culinaria cobre vida con facilidad! ¡Imagínate cortando tus verduras en nuestra encimera Scala de piedra o saboreando tus deliciosos platos en alguna de nuestras islas de cocina de color pastel! Y es que la convivencia y el placer de compartir momentos en un ambiente distendido constituyen pilares fundamentales del proceso creativo de los productos de Schmidt.

Súmate a la tendencia Twist y atrévete a combinar distintos estilos para crear una cocina con paneles 100 % reciclados.

Experimentar con la luz

¡Deja que la luz inunde tu vida y el interior de tu casa! El objetivo de la filosofía slow life es, ante todo, hacer que la gente sea más feliz. Y está científicamente demostrado que la exposición diaria a la luz influye positivamente en nuestro estado de ánimo. Así pues, para compensar la disminución de la luminosidad en invierno, no dudes en habilitar varias fuentes de luz que iluminen en todo momento tu decoración en colores pastel. Apuesta principalmente por el uso de velas, que, además de crear una atmósfera cálida, evitarán que aumente tu factura de la luz. Utiliza bombillas de bajo consumo para tus lámparas y el resto de tus dispositivos de iluminación de ambiente.