El verde: un color intemporal para toda la casa

¿Verde por toda la casa?

Auténtico color estrella de este nuevo año, el verde parece haber conquistado definitivamente el universo de la decoración. ¡Desde la cocina al salón y desde la entrada al cuarto de baño, este tono se cuela en las casas llegando hasta el último rincón! Pero ¿a qué se debe este retorno tan sonado? Puede que sea porque, en los tiempos actuales, necesitamos más que nunca volver a lo esencial. Y hay que admitir que la naturaleza simboliza lo inmutable y lo intemporal. La naturaleza representa para el ser humano un remanso de paz en el que resulta agradable reponer fuerzas. Y el verde es EL color más representativo de la vegetación. De ahí que no sorprenda en absoluto que, en los tiempos actuales, los franceses tengan ganas de volver a centrarse en lo esencial y que esta tendencia llegue hasta el interior de sus hogares.

Mueble TV con estantería verde

Una gama de verdes increíblemente diversa

Si bien el verde forma parte sin duda de la gran familia de los colores fríos, ¡no todos los tonos de verde resultan precisamente glaciales! Algunos de ellos pueden incluso generar la misma sensación de «calidez» que un rojo o un amarillo. ¡Tal es el caso, en particular, del verde manzana o el verde esmeralda, que pretenden aportar sobre todo vitalidad y frescura! No obstante, la variedad de tonos de este color es tan amplia que los amantes de la decoración clásica también se han visto seducidos por dicha gama, que incluye verdes de una profundidad extraordinaria como el verde inglés, el verde botella o incluso el verde Hooker. Entre aquellas personas a las que les agradan los colores menos llamativos, los tonos de verde pastel, más discretos pero igual de interesantes, tienen verdadero éxito. El verde caqui, el verde salvia, el verde almendra y el verde viridiana son algunos de los colores más vendidos actualmente.

Dormitorio y escritorio en verde y blanco.

¡Deja que la naturaleza entre en tu cocina!

¡Nada como una pintura verde salvia o verde almendra para crear un ambiente agradable y relajante en tu cocina! Y si hacemos caso a los maestros del Feng Shui, el verde es un color aperitivo… Dicho de otro modo: ¡un color que abre el apetito! Pintando una o varias paredes crearás al instante una atmósfera más cálida y cautivadora en tu estancia. Si tienes previsto remodelar tu cocina en breve, ¿por qué no optar por muebles con frentes verdes? Existen múltiples modelos de cocina que combinan armoniosamente el color con muebles de imitación de madera o materiales minerales que otorgan a la estancia un estilo escandinavo sumamente apreciado. El blanco es asimismo un tono que combina bien con el verde. Puedes plantearte, por ejemplo, pintar la pared de un verde bastante intenso —verde botella, verde pino o verde inglés— que permita realzar unos muebles blancos o de color neutro. ¡Una buena forma de aportar vitalidad a tu cocina reduciendo costes!

Cocina con muebles verdes e isla de hormigón.

Apostar o no por la monocromía de verde

Para las personas más audaces, la monocromía es una opción perfectamente válida… ¡siempre que no se queden a medias! Si has dado con el tono de tus sueños, ¡no te lo pienses! Pintar todas las paredes de una estancia de un mismo color constituye una opción decorativa arriesgada de la que, sin embargo, no te arrepentirás si surge de una reflexión detenida. Una decoración verde en el salón constituye sin duda una apuesta atrevida, pero el asombro suele estar garantizado si la combinas con materiales adecuados y colores a juego: un sofá gris de terciopelo, mantas de lana blanca, una mesa de madera clara, un mueble de TV de diseño, etc. El verde contribuye muchas veces a crear una atmósfera de tranquilidad y descanso. ¡Una especie de refugio agradable en el que pasar el rato y relajarse!

Cocina abierta al salón en verde esmeralda y blanco brillante.

Cómo lograr combinaciones afortunadas

Para que tu decoración de interior quede bien, los profesionales coinciden al menos en un aspecto: ¡no usar más de 2 o 3 colores por estancia! De no respetarse esta norma, el resultado será un batiburrillo que hará que el efecto buscado se diluya definitivamente entre los «excesos». Por tanto, para combinar tu verde de manera impecable, tienes que procurar elegir bien los colores con los que vayas a conjuntarlo. El verde salvia, por ejemplo, combina perfectamente con colores como el gris o el rosa viejo, mientras que un verde cromo o un verde abeto, por su parte, requerirán colores más vivos que estén a la altura en cuanto a intensidad. ¡Un color púrpura o un azul intenso superarán este reto sin dificultad! Si te va más el estilo mediterráneo, un verde oliva debería conjuntar bien y de forma duradera con un amarillo pálido o un rojo terracota. Pero, para asegurarse de no cometer errores, tienes a tu disposición una herramienta imprescindible: ¡el catálogo de colores!

Mueble esquinero en verde y blanco

¿Y por qué no añadir un toque de verde a tu cuarto de baño?

¿Te apetece aportar algo de vitalidad a tu baño? ¡Con unos toques de verde esmeralda o verde agua aquí y allá conseguirás que tu estancia adquiera una dimensión totalmente nueva! Si decides pintar las paredes de verde, recuerda comprar una pintura especial para estancias húmedas a fin de mantener la calidad del tono elegido a lo largo del tiempo. No obstante, tienes otras soluciones decorativas a tu alcance que te permitirán aportar unas pinceladas de verde a tu cuarto de baño:

• Construir un zócalo alicatado con azulejos tipo metro de color verde imperial, verde botella o verde abeto;
• Optar por baldosas de cerámica o azulejos de pared verdes para recubrir las paredes en torno a la ducha o bañera.
• Instalar una bañera con un toque de verde caqui o verde celadón;
• Adornar la estancia con accesorios verdes: una jabonera, una cortina de ducha, plantas, un espejo, etc.
• Decantarte por muebles de cuarto de baño verdes,

Cuarto de baño abuhardillado en verde vegetal.